Para mí, participar en este reto fue una experiencia nueva, ya que en su primera edición no pude asistir debido a compromisos laborales. Así que esta vez, decidí unirme a mi tocayo, Eduardo Interian, para recorrer juntos los desafiantes caminos de la sierrita yucateca. Desde el inicio, el evento se mostró bien organizado y claramente señalizado, lo que permitió a los participantes disfrutar sin contratiempos.
Mi día comenzó así: Un poco pasaditos de las tres de la mañana nos dimos cita a un lado del puente de Anikabil en Ciudad Caucel (Mérida), nos acompañaba el buen amigo Jose Luis Ch, corredor de mil competencias y ganador de ninguna, ¡pero cómo se divierte!. Trepamos las bicis a la camioneta y partimos hacia "La Huerta del Estado" Oxkutzcab, Yuc. Cabe mencionar que tuve una reunioncita con los amigos del club y únicamente dormí a lo mucho unas dos horas, no creo haber sido el único e incluso no dudo que alguien se haya ido "en vivo y a todos color" sin el menor pestañazo para no perderse de este eventazo.
A pesar de un desvío y la densa niebla en carretera, pudimos llegar con buen tiempo para bajar las bicis y prepararnos, por cierto, agradezco al buen amigo Hunac David por haberme entregado mi número de competidor pues, no pude pasar por él, mi asistencia estaba en duda, no tenía la preparación como siempre, nos gusta sufrir.
Mis compañeros de viaje, ambos iban a 85 km, yo estaba enfilado para el grupo de salida de 55 km. donde me encontré a mis camaradas Edwin Esteban Chulim Pech (Chef), Pino de Flow riders y el buen Mario Uc de Maxcanú MTB, quien sería mi "rémora" durante gran parte del trayecto.
La salida fue puntual y el contingente se dirigió hacia la subida de la ermita, un lugar icónico para cada competencia de MTB en Ox, en el camino fui saludando a algunos conocidos mientras me concentraba en administrarme y no tirar pierna desde los primeros kilómetros, yendo a mi ritmo mientras otros me rebasaban. En mi mente ya estaba marcado mi plan, no vamos por pódium, no vamos a competir con los demás, sino a mejorar nuestro desempeño y tratar de terminar lo mejor posible sin quemar la máquina.
Después de bajar la ermita, pasamos por varias calles del poblado hasta llegar a la parte donde empiezan la brecha, un terreno de tierra roja y piedras con cierto grado de dificultad hasta salir nuevamente a carretera y con rumbo a las grutas de Loltun, donde estaba el primer puesto de hidratación, allí me surtí de dulces de miel, gomitas, palanquetas, plátano, powerade, hielo y agua. Apenas eran 17 kilómetros y el tramo que seguía tenía de todo, carretera, brecha, piedras, subidas, bajadas y unas vistas muy hermosas. Precisamente aquí es donde Mariito AnnDres UC Perera me empezó a acompañar, ya que a Abraham Pino le salieron alas.
No puedo dejar de mencionar que, del club Dirt Riders MTB Mérida también participó Abraham Wejebe Gomez, antes que me reclame!
El hecho de haber pasado en buenas condiciones los primeros 20 kilómetros del Reto Xibalba ya era un gran logro, ahora tocaba pasar el área más larga entre puestos de hidratación, así que si no te abasteciste lo suficiente te la ibas a pelar, pues el solecito ya empezaba a dar latigazos. Claro que, hablo en mi condición de ciclista recreativo, de esos que no llevan algún tipo de entrenamiento y solo ruedan 20 km los fines de semana.
Después de tomar una desviación, iniciamos un camino entre parcelas con gran variedad de terrenos y algunas pendientes de buena inclinación y distancia, mientras echaba la plática con Mario Uc sobre cosas de bicicletas y también de hacer algunas rodadas endureras por el área de Ticul, que tan de moda se ha puesto por sus temblores.
Nos dimos cuenta que íbamos prácticamente solos, ya tenía rato que no veíamos otros ciclistas. Nos dirigíamos al tramo conocido como "Las Jorobas" que nunca había pasado, se trata de unos columpios que van subiendo de dificultad y de inclinación, en una de esas bajadas por poco y me doy en la madre, pues mi rueda delantera se fue dentro de un surco y de puro milagro pude salir sin caerme.
De pronto llegamos a un tramo muy agradable, era un sendero angosto y liso entre una arboleda con bastante sombra y al final estaba el tan buscado punto de hidratación de los 40 Km, donde se dividía el trayecto a 55 y 85 Km.
¡Ese puesto de hidratación parecía un Oxxo en medio de la nada, estaba super surtido de cosas para comer como sandía, plátano, piña, dulces, agua, hielo y lo más chingón fue los pedacitos de tamal con su salsa de tomate y vasitos de Coca~Cola, yo me dije -De aquí soy! ¡Le di como niño de hospicio! Mientras estábamos allí nos alcanzaron varios ciclistas, entre ellos mis grandes amigos de FCP Los Teachers con el Profr. Jose Adrian Cetina Quiñones y compañía, así como el buen Ve Chatuber y su gran sentido del humor.
Para esos momentos ya las piernas empezaban a arder por el castigo y para evitar un calambre, les tiré agua helada de mi camelback y sentí un refrescante alivio. ¡Otra parte más íntima de mi cuerpo también ya sentía el rigor del asiento, pero le dije -Tranquilo chiquilin, luego te doy tu cremita!
Bueno, pues a darle, ahora nos tocaba alcanzar a los que nos habían rebasado mientras incabamos el diente, quedaban 15 km (Supuestamente) pero también tenían su grado de dificultad, incluso pude reconocer algunas áreas donde había pasado hace unos años, en otra competencia, si... ¡Una donde no dieron hidratación! En este tramo vi al buen Ramón de Fotos de un aficionado, este cuate no necesita presentación y seguramente me tomó excelentes fotos. (¿A ver a que hora las sube?).
Al terminar ese zig-zagueante y empedrado tramo, se llegaba a un cruce de carretera con una pequeña súbdita donde iniciaba la zona de "Torres", allí nos esperaba Verde Guillen con cámara en mano que, por cierto, soy su fan desde hace ya algún tiempo, les invito a que visiten su página de FB, tiene unas fotos maravillosas de Yucatán.
Para ese entonces, mi cuate Mariito AnnDres UC Perera ya se me había despegado, soltó mi chuchú, incluso ya no lo volví a ver hasta la zona de meta. Después de 5 kilómetros de torres, salíamos a carretera. ¿Se acuerdan de la muy mentada "Cama de piedra"?, pues ya pavimentaron la entrada, que bueno que no pasó la competencia por allí, era un martirio a los riñones!
Desde allí únicamente era pura carretera, donde los licreros hicieron lo suyo, se trataba de una extensa subida en curva y de allí hasta el poblado de Oxcutzcab, el único pedo fue a la entrada de la zona de abastos, ya no había abanderados o señalamientos para llegar al arco de meta, bueno en fin, con un poco de sentido común pudimos llegar. Una vez ya con mi medalla, pude saludar a mis grandes amigas de Cycling House, Maria Jose Bolio Montero y al buen Ignacio J. Murrieta de Makrobike quienes fueron patrocinadores y participaron en este evento de MTB.
No uso Garmin o Apps, pero muchos me dijeron que al final fueron 59 Km y no 55 Km como se había anunciado, pero realmente no es una gran diferencia, se sufrió un poco, pero se disfrutó inmensamente.
Tuve un saldo blanco, cero caídas y únicamente me bajé en una subida donde patinó mi llanta trasera, ¡Ah y me lleve un naranjazo en la mano al pasar junto a una mata!
Mi tiempo del recorrido fue 4 horas llegando en el 9o lugar de mi categoría Master 50, 74 Varonil y 96 General de 55 Km. Esta vez competí con una Transitión Patrol la cual cruzaba las piedras como miel sobre hojuelas, buen navezón, gracias Mike Urzaiz por patrocinarme.
Mis compañeros de viaje Eduardo Interian y Jose Luis Ch llegaron mucho después, ya que hicieron 85 Km como anteriormente dije y esta compe les sirvió de entrenamiento para asistir en marzo a la Clásica Coyote, mientras pude saludar al buen Sergio Noh de XUUX MTB del Camino Real A quien le preste algunas fotos para esta publicación.
Quiero hacer mención nuevamente de la excelente organización y la buena atención del staff del Reto Xibalba, los que asistimos estamos seguros de volver y hacer de este evento una verdadera clásica, enhorabuena por este magnifico evento de MTB Enduro.
¡Hasta la vista, babys! 🤟😎
